El descubrimiento de la fuente de agua mineral en las orillas del río Ribeirão da Prata, en el 1876, por Rufino Luiz de Castro Gavião, que ahí cazaba proveniente de São João da Boa Vista, se atribuye a la casualidad. El cazador recorría las tierras del Alegre cuando se dio cuenta de la preferencia de la fauna para el agua de manantial, decidió probarla y fue sorprendido por sus cualidades. El evento fue reportado y confirmado por otras personas.
Con la inauguración de la ampliación del ferrocarril Mogiana desde Cascavel (hoy Aguaí) para Poços de Caldas, en el 1886, se despertó el interés de los agricultores de la región a la estación de carga de ferrocarril en el valle bañado por Ribeirão da Prata y Arroyo de la Platina, por lo que comenzaron a construir sus casas cerca de la estación, y, a continuación, nasció un poblado.
En el año de 1916 se hizo el primer hotel y, por la iniciativa privada de sus habitantes se llevó a cabo el análisis químico de las fuentes de agua en la que se constató sus propiedades alcalinas, asemejándose a aquellas fuentes de Vichy en Francia, haciendose conocer, la Prata, como la Vichy Brasileña.
La vocación a Estación Hidromineral se consolida cuando químicos del Departamento de Geografía y Geología del Estado, investigando la zona, realizaron prospección de las fuentes y comprobaron la viabilidad de la explotación económica de su minería.
Se creó en el 1913 una empresa con este propósito, de lo que surgieron hoteles y toda la infraestructura necesaria. En el 1925, fue creado el Distrito de Paz de Águas da Prata, en el municipio de São João da Boa Vista. La ciudad de la Estación Hidromineral de Águas da Prata se instaló en diciembre de 1935, cambiando el nombre para Águas da Prata.
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