Bañada por los ríos Dulce y Verde, la ciudad surgió de un campamento de trabajadores que cortaban madera para abastecer las traviesas del ferrocarril que seguia a Río Pardo. La primera estación de la localidad fue llamada Rio Doce, luego Río Verde, de lo que se inspiró el nombre de la ciudad en Tupí.
El camino a la ciudad de Vargem Grande do Sul es un trecho de unos 15 kilómetros por carretera asfaltada, pero no es un tramo animado, donde, a pesar del asfalto, no viene a ser aburrido.
(Datos obtenidos de la “Guía Camino de la Fe” para ciclistas y peatones).